EL CUIDADO DE NUESTRA RIQUEZA
- CAC 2020
- 18 jun 2020
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En un pueblo muy lejano denominado Chiscas existe un gran paisaje donde habitaban venados, conejos, cóndores, tigrillos, armadillos, colibrís, azulejos y muchos animalitos más que viven en estas cumbres; también plantas de uso medicinal como árnica, guasguin romeros, itamo real, salvia, piñuela, granizo, camareras y otras con propiedades como el encenillo que fue arruinado para quitarle la corteza para sacar pinturas; también se encontraban majestuosos frailejones muy hermosos, orquídeas, sus habitantes valoraban mucho todo lo que tenían, ya que en estos lugares nace el agua y también es el hogar de estos animales, este paisaje tan hermoso, atractivo turístico, donde existe un grupo de jóvenes voluntarios guardianes del bosque entre ellos estaban Manuel, Andrés, Steven y camilo que les gustaba velar por el cuidado y protección de la naturaleza.
Ellos todos los fines de semana iban a esta zona para ser guardines de bosque y guías de visitantes, una de sus tareas era echar en una mochila todos los papeles y basura que la gente arrojaba al piso y llevarlos al pueblo, para darles el manejo correcto, porque sentían el amor y cuidado por la naturaleza, un día llegaron más turistas de lo habitual se dividieron y comenzaron a guiarlos uno de ellos era un empresario Italiano que fumaba muchísimo, en treinta minutos ya se había fumado media cajetilla de cigarros en un momento enciendo el sexto cigarro lanzo el fosforo muy cerca de un gran frailejón que contenía mucha trementina, al momento se incendió y quemo el frailejón y una parte de pasto y pajas, en ese momento corría el viento y casi se torna imposible de controlar la quema; los guías lograron controlarla. El extranjero envés arrepentirse dijo en voz baja imagínate la fortuna, que aria si talara todo esto y quitara la trementina algunos lo escucharon, pero no le pusieron atención el hombre fue reprendido por los guías.
Casi un mes después volvió con herramientas y materiales para desarrollar su astucia malvada haciéndole daño al páramo, recogiendo plantas medicínales y la trementina de muchos frailejones, ya que se había dado cuenta del valor y propiedades de estas plantas; enterados los habitantes de la zona de esta situación, se rebelaron para no permitirle su hazaña. El italiano los intento sobornar, pero los campesinos se negaron y lo sacaron de esa zona y se vio obligado a devolverse a su tierra de origen; en ese momento los habitantes aprendieron la importancia de estar unidos y hoy trabajan todos por el cuidado y protección de la naturaleza.
MANUEL EMIRO CUADROS SUESCUN
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